LA
FLECA
Peñíscola

"EL HORNO DEL TÍO QUICO"


Antiguo horno denominado popularmente “LA FLECA” catalogado dentro de la sección 2ª del Inventario General del Patrimonio Cultural Valenciano como Bien de Revelancia Local. El horno posee datación de principios del S.XIX (1809) según la inscripción que aparece en la puerta de entrada. Sin embargo, por su tipologia interior, podría catalogase como de mayor antigüedad, pudiendo dicha fecha dar constancia, únicamente de una ampliación y/o posible restauración de la fachada.

TIPOLOGÍA DEL EDIFICIO

Tipológicamente podemos incluir este edificio dentro de la aquítectura civil de arcos de diafragma y más concretamente entre la tipología de los hornos tradicionales valencianos. En época medieval, el horno de pan valenciano y horno de “pan cocer”, encajado en el interior de un edificio, estaba formado por las siguientes estancias:

1. OLLA: bóveda de fábrica de ladrillo, rellena por la parte superior con abundante tierra o arena; que permitía un gran aislamiento térmico y, en consecuencia, la retención del calor generado por la combustión de la leña. La base donde se colocaba el pan para su cocción, estaba pavimentada de ladrillo, losas de ródeno u otra piedra arenisca, materiales que guardaban bien el calor.



2. TIRO DE LA CHIMENEA: sobre la vertical de la olla, en su exterior, se dispónia el tiro de la chimenea para la salida de humos.

3. ALCABOR: Sobre la olla se solía ubicar el “alcabor”, un recinto que se utilizaba para desecar productos y fermentar la pasta.
El horno propiamente dicho quedaba en el interior de una sala que recibía el nombre de “fleca” y que servía para almacenar la leña, amasar el pan y preparar variados alimentos obtenidos en la cocción. En esta sala se construía generalmente mediante el sistema estructural de arcos diafragma y se cubría con techumbre de madera.

CONTEXTUALIZACIÓN Y FUNCIONAMIENTO DEL EDIFICIO

Por su típología, símilar a los hornos de Sant Mateu y Benassal (ambos del s.XIV), probablemente el horno tenga un origen medieval. Estos dos hornos del Maestrat se construyeron bajo el gobierno de Montesa, la cual concedio los permisos para el establecimiento de hornos. En Peñíscola, la orden de Montesa sucedió a la del Temple; por lo que pudo conceder en el municipio permisos similares para estos establecimientos.

Los establecimientos de la villas y ciudades funcionaban como preceptos legales o normas de valor, que junto con las actas de Corte, Privilegios, Pragmáticas, Cartas Pueblas, Ordenaciones y, sobre todo, los Fueros que otorgó Jaume I al Reino de Valencia, son el fundamento del Derecho Valenciano.

OBLIGACIONES DEL HORNERO

En el “Llibre d’Establiments de la Universitat de la Bida de Peníscola de 1701”, nos encontramos con alguna de la obligaciones del hornero:

CVII
QUE LO FORNER DEGA FER LO FORN BO I COMPETENT

Ittem establiren i ordenaren qye qualsevol forner haja i tinga obligació de fer lo forn bo i competent, i si ó farà i cremarà lo pa que encórrega en pena de deu sous, partits ut supra: y si alguna perçona pedra lo pa per mal cuyt o cremat que encórrega lo dir forner en la sobredita pena de deu sous, y que en dit cas sia vesurat per los jurats de la present vila.


Este sistema de funcionamiento del horno se mantendrá así hasta la caída del Antiguo Régimen y la transición del feudalismo al capitalismo como modo de producción.

Este horno en concreto estuvo en funcionamiento hasta bien entrada la segunda mitad del S.XX. Denominado popularmente como “La Fleca” o también conocido como el “Forn del tio Quico”, sirviendo como horno de cocción, tanto a las diferentes panaderías ubicadas en la ciudad, como para cualquier ciudadano que necesitase de sus servicios, ya fuese para la cocción de pan o para cualquier otro tipo de viandas.

No dejes de visitarnos, estamos en uno de los lugares más bellos del casco antiguo, junto al ayuntamiento e iglesia parroquial.